Frente a rutinas cada vez más cargadas, suele ser difícil coordinar nuestras agendas sin olvidar nada: reuniones laborales, actividades, trámites, cumpleaños y cuestiones del hogar. Los planes diarios pueden llegar a postergar tus turnos y chequeos médicos anuales una y otra vez. Además, suele ser confuso determinar qué estudios realizar o qué médicos consultar según tu edad y condiciones físicas. Para ayudarte a optimizar tu tiempo, te compartimos toda la información que necesitás saber para mantenerte siempre al día con tu salud:
- Chequeo general con médico clínico. Es un estudio completo que te ayudará a tener un panorama general de tu estado de salud. En la consulta, además del examen físico (control de presión y peso) se realizan estudios de laboratorio, radiológicos, electrocardiograma y evaluación nutricional. A su vez, puede que tu médico te derive a otras especialidades según tus antecedentes genéticos o condiciones físicas.
- Chequeo ginecológico. Es fundamental que todas las mujeres, una vez iniciada su adolescencia, comiencen con sus consultas ginecológicas. Dentro de los exámenes más importantes se encuentran: prueba de papanicolau, ecografía abdominal, ecografía mamaria y mamografía a partir de los 35-40 años.
- Consulta urológica. A partir de los 50 años, todos los hombres deben realizar consultas anuales con un urólogo.
- Consulta dermatológica. Es fundamental revisar tus lunares y manchas para chequear su aspecto, color y textura y corroborar que no haya ninguna afección en tu piel.
- Control odontológico. Idealmente, es bueno consultar a tu dentista cada 6 meses para realizar una limpieza general, chequear tu salud bucal y evitar complicaciones.
- Control oftalmológico. En este caso, se indica este tipo de chequeo en adultos a partir de los 40 años cada 2 años, siempre y cuando no haya antecedentes o factores que requieran un seguimiento más detenido.